Luego de su célebre victoria en Troya, Ulises se sintió con todo el derecho de tomar unas largas vacaciones, así que zarpó junto con su tripulación dispuesto a recorrer los siete mares. Pasó diez años celebrando magníficas veladas y gloriosas bacanales. Hasta que un día, sin darse cuenta, desembarcó en Ítaca, su isla natal. La Odisea es sólo una excusa presentada para calmar a la furibunda Penélope.